mayo 31, 2023

Las manos de mi abuela

En la imagen de sus manos caben muchas otras manos.

Aquellas que sostuvo cuando una amiga pidió su ayuda,

la que apresuró para alejar a alguien del peligro.

Aquellas manos que mantuvo cálidas cuando un familiar perdió a un ser irreemplazable.

 

Sus manos son como puertas abiertas.

A veces se empuñaron porque tuvo que contener ese coraje que no le dejaron gritar.

A veces le temblaron y congelaron porque sus ojos no soportaron ver tanto dolor,

o tanta tristeza, y sus manos fueron sostén de sus emociones.

 

En sus manos habita una quemadura de una cena navideña.

En sus manos corrieron ríos de vida. Dieron vida y las edificó.

Sus manos blancas delatan manchas de sol y venas pronunciadas,

los mapas biográficos de todos los novios de su juventud.

 

Tener sus manos,

y volver a sus manos, es volver al inicio de todo.

 

Mira tus manos, abuela

y mira cómo susurran palabras de amor desde la tierra hasta los oídos del cielo.